Las veces que vino no fueron demasiadas, pero ella las recordaba con alegría (y con tristeza y con rabia, ella era compleja, es decir, era gente). Ella salía de la casa y lo esperaba. Alguna vez la espera fue vana, pero ella prefería olvidar, sin que por eso obviara el sufrimiento. Si uno sufre, es porque está vivo, pensaba y sentía culpa por ser tan poco original. El se había dado cuenta de que ella lo amaba antes que ella misma atinara a hacerlo. Creo que la manipulaba, muy torpemente, no era ducho en esas cosas, como no lo era en casi ninguna que tuviera implicaciones prácticas en una vida normal. Él anhelaba una vida normal, es decir, no tener una vida normal, sino disfrutarla. Hacerlo como las personas que cantaban una canción de moda, las que iban a bailar el viernes y dormían el sábado hasta tarde y las que al morir decían díganle que tuve una hermosa vida. Él no bailaba y ella se deleitaba en un merengue o una salsa. Un corro casi siempre surgía junto a ella: sabía transmitir entusiasmo, aunque se hacía algo sospechoso que siempre usaba sus habilidades en las fiestas y a horas más bien tardías.
un sitio de reunión para todos aquellos que escriban o que pretendan hacerlo. sobre todo aquellos que escribimos en las sombras e, incluso, en una zona de cierta penumbra.
martes, 30 de junio de 2009
Esto era y luego terminó
Publicado por David Colina en 10:27:00 a. m. 2 comentarios
sábado, 27 de junio de 2009
No exageremos
Onetti, maravilloso escritor, partamos de allí, en ciertos párrafos cercanos al final de su novela breve El Pozo, expresa lo siguiente:
Conocí mucha gente, obreros, gente de los frigoríficos, aporreada por la vida, perseguida por la desgracia de manera implacable, elevándose sobre la propia miseria de sus vidas para pensar y actuar en relación a todos los pobres del mundo. Habría algunos movidos por la ambición, el rencor o la envidia. Pongamos que muchos, que la mayoría. Pero en la gente del pueblo, la que es pueblo de manera legítima, los pobres, hijos de pobres, nietos de pobres, tienen algo esencial incontaminado, algo hecho de pureza, infantil, candoroso, recio, leal, con lo que siempre es posible contar en las circunstancias graves de la vida.
Bien quedan estas palabras como homenaje a esa gente que nunca cuenta, a la gente comparsa, a la gente masa-mítin-cerveza, a la gente que es sencilla y que esgrime su sencillez por toda propiedad, a la gente que es como uno (ojo, no aludo a todos en este uno, a pesar de aquello de la Unidad y sus consecuencias) por mucha rabia que nos dé. Está bueno y es justo. Lo que en modo alguno debería ser admisible es la posibilidad de un loar en exceso, de un mitificar una figura abstracta que devenga, a la manera del concepto del buen salvaje, en un modelo de hombre bueno y justo, el hombre de pueblo, el popular, el buen pobre, el hombre comunitario. Consecuencias camboyanas no estarían en un horizonte lejano.
Me he criado en un barrio, en una comunidad de bajos recursos, es decir, sé lo que es ser pobre, sin exagerar, sin entrar en ejemplos dignos de Dickens o Victor Hugo, nada de eso. He sido pobre sin ser ostentoso por ello. Conozco a la gente sencilla y aporreada, de cerca, alguna novia tuve allí y sí, hay gente muy buena, y hay algo candoroso en todo el asunto. Pero no llevemos al extremo las cosas. Las dos veces que he sido víctima del hampa, fue a manos de gente llena de candor, infantil, pues. Los asesinatos que he contemplado (ejecutados ya, no en ejecución), ocurrieron a manos de gente sencilla y contra gente sencilla. El paraíso tampoco está en el barrio, en la favela, en la villa. Pero debemos procurar que allí tampoco se instale el infierno, que eso quede claro, porque allí tengo amigos y familia y aunque no los tuviera.
Hoy en día la ingenuidad no se castiga, porque es imposible. Que esto se entienda, que se explique, que vengan y traigan algo, porque ya no va quedando nada.
P.D. Vi a un jurista en la televisión estatal explicando cómo era viable, luego de la reforma de la norma procedimental, la intervención de comunicaciones privadas por mandato de un juez. De un juez, acotaba e insistía. Un juez es gente, tal vez no sea gente ingenua, pero es gente, adinerada tal vez, lo que no comporta nada, pero debe ser acotado. Soy abogado y conozco al algún que otro magistrado y doy fe. Los jueces no son tampoco seres de luz, no, nada, son, solo son y no más. Por tanto, no sé, creo que no me convence la vehemencia con que el jurista del que ya hablé tan poco les invoca, como toda razón, como axioma, cual 3,1416 (por ser sencillos expresemos esto así), en sustitución de razonamientos verdaderos que validen sus postulados.
Publicado por David Colina en 3:28:00 p. m. 2 comentarios
miércoles, 24 de junio de 2009
Alegría
La idea es, no nos dé vergüenza estar contentos, no huyamos de las películas por su dolor, por su crueldad o por su excentricidad. Juzguemos por su calidad y si no sabemos mucho de la técnica y el lenguaje del cine (me pasa un poco así, pero no tanto, tampoco voy a exagerar para hacerme el inocente y puro), habrá que hacerlo de pura emoción, de puro oído o de pura mirada. Vaya también esa recomendación a lo demás que tenga que ver con el arte, es decir, con esa forma particular de hablar con los demás sin verlos y diciendo la verdad así se mienta. Sobre todo cuando se miente.
Contento estoy, ya se sabe, que se sepa. Nihil Obstat.
Publicado por David Colina en 9:18:00 p. m. 0 comentarios
lunes, 22 de junio de 2009
ACLARATORIA NO SOLICITADA
Publicado por David Colina en 9:28:00 p. m. 2 comentarios
sábado, 20 de junio de 2009
AMÉN
Que te acoja la muerte
con todos tus sueños intactos.
Al retorno de una furiosa adolescencia,
al comienzo de las vacaciones que nunca te dieron,
te distinguirá la muerte con su primer aviso.
Te abrirá los ojos a sus grandes aguas,
te iniciará en su constante brisa de otro mundo.
La muerte se confundirá con tus sueños
y en ellos reconocerá los signos
que antaño fuera dejando,
como un cazador que a su regreso
reconoce sus marcas en la brecha
Publicado por David Colina en 7:56:00 p. m. 2 comentarios
El pasado vuelve un rato
Publicado por David Colina en 11:35:00 a. m. 0 comentarios
martes, 16 de junio de 2009
Un intelectual, obvio, famoso
Un intelectual no es un ser de luz, ni un ángel, sólo es alguien que tiene por costumbre leer mucho y de quien se presume que también piensa mucho. Digo se presume porque prueba conclusiva no la puede haber. Y digo, en el mejor de los casos, la demostración de la cantidad de pensamiento no implica la bondad del mismo. No traigo acá elementos éticos que pudieran considerarse necesarios a la hora de definir el perfil del intelectual marco. No lo hago porque entraríamos en honduras insuperables. De tal modo, debo acudir a la noción más simple para intentar abarcar el espectro de todo lo que se entiende (y autodenomina), en el campo de la intelectualidad, de la nuestra intelectualidad y a cualquier intelectual le avergonzaría demasiado una idea tan sencillota, tan pan con mantequilla, tan pan solo y agua de chorro. Un intelectual opina mucho, tal vez demasiado, pero en su descargo debe decirse que no toma demasiado en serio cuánto dice, bien por la conciencia de su propia falibilidad, por la flexibilidad de sus opiniones, en consonancia con la mutabilidad e infinita complejidad del mundo y de sus cosas, sean éstas las que sean y la hora que sean o por mala memoria o mala fé.
Lo que maliciosamente pretendo expresar es que no veo razones válidas o al menos medianamente decentes para exigir al intelectual (o a quien haga sus veces y no pocas), una suerte de comportamiento ascético, de comportamiento mantillesco (en recuerdo de aquel libro Mantilla, en que los niños eran más bolsas que el carajo), pero que para ser tal debe corresponder de manera exacta con las expectativas, con todas la expectativas del lector que le critique.En dias recientes he asistido, con agrado, a distintas diatribas virtuales sobre el comportamiento político y opiniones emitidas en variados momentos y contextos históricos por: Jorge Luis Borges, Mario Benedetti, Silvio Rodríguez, Mario Vargas Llosa, discusiones teñidas de los colores pertinentes a la cuestión política en Venezuela. Justo es aclarar, para un lector foráneo, que estos colores, antes que corresponder a los que caracterizan a nuestros Partidos Políticos, son el de hormiga y el del excremento humano, tostado o no al sol.
Aunque he esgrimido una defensa a ultranza de Borges, de quién he dicho que era muy viejo y estaba ciego en la época en que fueron a importunarle con tales preguntas, no debemos ser demasiado exigentes con los otros, pues no debe olvidarse que son seres humanos con grandes errores, no son seres de luz, seres iluminados, porque nadie lo es, o al menos nadie que yo haya conocido y así lo digo.Publicado por David Colina en 12:37:00 p. m. 2 comentarios
Etiquetas: razones
lunes, 15 de junio de 2009
Hoy esto pienso
Los otros, a los que me referí antes, ellos tal vez tampoco sean portadores de la verdad, pero la ilusión que crean en nosotros en tan necesaria como la idea de Dios para seguir adelante, para no sucumbir ante un mundo sin sentido, sin valores, un mundo relativo, un mundo que ni siquiera debería ser objeto de reflexión. Tal vez moleste a alguien el que yo diga que la idea de Dios es necesaria. Para mí lo es y a cambio de eso no me ofende el ateismo o el agnosticismo, porque sé que también son muestras de fe, de una fe acaso más ingenua, más pura y casta que la que el hecho de creer en Dios, así sea muy vagamente, requiere. Hoy esto pienso y dejo constancia de tal.
Publicado por David Colina en 1:16:00 p. m. 0 comentarios
domingo, 14 de junio de 2009
La doctrina del shock
Cada día es más evidente la sabiduría que se desprende de este video, basado en la obra de Naomi Klein, cada cual compare lo planteado en él con los modos de proceder de su gobierno preferido o aborrecido.
La doctrina de Shock
Link: http://elfuegosordo.blogspot.com/2007/10/solo-miren-este-video.html
Publicado por David Colina en 9:18:00 a. m. 0 comentarios
sábado, 13 de junio de 2009
Observación exacta
Publicado por David Colina en 7:13:00 a. m. 0 comentarios
Etiquetas: Observación
jueves, 11 de junio de 2009
Aclaratoria
Debo decir de mí que trabajo y hago mercado, que con frecuencia miro el calendario para ver qué tal lejos está el día de pago y acto seguido, miro la nevera para comprobar la ausencias alimentarias que ella consten. Que tengo auto pero no lo manejo, que ando en transporte público e incluso a pie por la ciudad y que he sido asaltado, como todo ciudadano que se precie de tal. Que lo político me preocupa, por lo que pueda afectar a mi vida y por la parte de estupidez y simplismo que aporta a personas que no necesitaban tales auxilios, sobre todo en este país y por estas fechas.
Sin embargo, las reflexiones o los relatos, los comentarios o las citas con las que lleno el espacio de este blog, son las que se me hacen necesarias en cuanto me siento y abro www.blogger.com, qué se le va a hacer.
Así es la vida y el arte, aunque lo mío no se trate de arte y tal vez sí, en un pequeño porcentaje, de vida.
Publicado por David Colina en 5:34:00 a. m. 0 comentarios
Etiquetas: El que entienda levante la mano y se va, razón de ser
miércoles, 10 de junio de 2009
LA PUTREFACIÓN NECESARIA
Publicado por David Colina en 2:12:00 p. m. 0 comentarios
Etiquetas: El que entienda levante la mano y se va
martes, 9 de junio de 2009
El vacío
¿Por qué será que cuando escucho expresiones como:
1.- Un gran acuerdo nacional
2.- Es una novela interesante, de verdad un trabajo notable
3.- Estamos evaluando las necesidades del pueblo para reprogramar nuestras metas
4.- No eres tú, soy yo
5.- Estamos trabajando en eso
6.- Le acompaño en la pena
7.- La comunidad, por sí misma, asume las decisiones que le competan
8.- Un fantasma recorre la tierra...
se me pone la mente en blanco?
Publicado por David Colina en 6:02:00 p. m. 0 comentarios